miércoles, 29 de mayo de 2013

DESCENSO INTERNACIONAL DEL SELLA







El Descenso Internacional del Sella, también conocida en Asturias por la “Fiesta de les Piragües”, se celebra cada primer sábado de Agosto desde 1930. Es la primera fiesta española de carácter festivo-deportivo declarada oficialmente como Fiesta de Interés Turístico Internacional. 



 La compañía de tren FEVE pone ese día a disposición de los aficionados el «Tren Fluvial». Desde Arriondas realiza un recorrido paralelo al río por donde transcurre la carrera con paradas en distintos puntos para bajar y mirar de cerca el descenso. Justo antes de la salida y con la llegada del Tren Fluvial a Arriondas se inicia un particular desfile por la ciudad con vehículos engalanados y grupos folclóricos. 

Se entona el Asturias, Patria querida y luego el Tren Fluvial y la caravana de coches sigue el descenso por los márgenes del río. Tras la llegada, se sirve una típica comida asturiana en los Campos de la Ova (Llovio) compuesta de fabes y arroz con leche y se realiza la entrega de trofeos. La Fiesta de les Piragües se celebra el viernes noche en Arriondas y el sábado noche en Ribadesella. Estas dos ciudades quedan tomadas por los campistas y los visitantes de todas partes de España e incluso del extranjero. Sus centros urbanos quedan cortados al tráfico y tomados por riadas de gente. 


 Historia 

 En 1929 Dionisio de la Huerta, durante sus vacaciones de verano en su casa de Coya, en Infiesto decidió hacer una excursión en piragua por el río Piloña, desde Coya hasta Infiesto junto con un grupo de amigos, recorrieron cerca de cinco kilómetros por el río durante dos horas y media. Lo que parecía una anécdota no se quedó allí. Con la experiencia de aquellos cinco kilómetros recorridos en piragua, Dionisio de la Huerta convenció a su amigo Alfonso Argüelles y a Manés Fernandez para que le acompañase río abajo hasta Arriondas. En aquella primera excursión utilizaron piraguas con flotadores y fueron acompañados por otro grupo de amigos que les seguían en autocar. Con reiteradas paradas para sacar el agua de la piragua y algún que otro bocadillo, les pilló la noche en Soto de Dueñas, por lo que, después de reponer fuerzas, decidieron dejarlo para mejor ocasión. Habían recorrido en aquella aventura unos catorce kilómetros y estuvieron durante más de siete horas disfrutando del río y del paisaje, que era lo que de verdad le interesaba. En Infiesto no se hablaba de otra cosa que de Dionisio de la Huerta y de sus aventuras. Esta excursión de unos amigos fue el germen del actual Descenso del Sella y de la Fiesta de las Piraguas.Los dos años siguientes se celebraron lo que más tarde serían las dos primeras ediciones de esta prueba en las que Dionisio de la Huerta, Manés Fernández y Alfonso Argüelles realizaron el descenso desde Coya hasta Arriondas en 1930 y hasta Ribadesella en 1931. En 1932 se fijaron la salida y meta definitivas en Arriondas y Ribadesella y se realizó la primera edición de carácter competitivo con trece palistas provenientes de Oviedo, Gijón, Infiesto y Ribadesella y teniendo el carácter de Descenso Provincial. En 1935 llegarían las primeras inscripciones de palistas no asturianos en el Descenso Nacional del Sella.La Guerra Civil paralizó el Descenso entre los años 1936 y 1943 debido a la Guerra Civil y a la postguerra y se reanudó el 11 de agosto de 1944, cuando once piraguas tomaron la salida en Arriondas. En 1951 se inscribirán por primera vez competidores extranjeros, italianos, portugueses y franceses. 

En el año 1955 se inscribe el primer equipo de otro continente, el cubano. Convirtiéndose en el Descenso Internacional del Sella. El año 1960 marca un hito en la historia del Descenso, en ese año se crea la Federación Española de Piragüismo, desligándose de la Federación de Remo, algo que había sido solicitado repetidas veces por Dionisio de la Huerta y que garantizaba el futuro de la fiesta de las piraguas. En la edición de 1994 participaron más de 1.400 embarcaciones, la convocatoria más numerosa hasta la fecha, convirtiendo El Descenso del Sella en la cita más importante del piragüismo mundial.

 La Prueba 

 El Descenso Internacional del Sella es una competición que tiene lugar cada primer sábado de agosto entre Arriondas y Ribadesella (Principado de Asturias – España), con un recorrido de 20 Kms. En ella pueden participar palistas españoles y extranjeros que tengan la licencia de competición del año en curso. Esta prueba está organizada por la Federación Española de Piragüismo, al Comité Organizador del Descenso Internacional del Sella y a la Federación de Piragüismo del Principado de Asturias. 

 La salida oficial tiene lugar a las 12:00 de la mañana. Las embarcaciones deberán estar situadas una hora antes, a las 11 de la mañana, en el puesto de salida según el resultado del Sorteo realizado previamente, sus posiciones serán verificadas por los Jueces de Orilla. La Salida es de tipo “Sella”, es decir, con los participantes y sus embarcaciones fuera del agua. Las palas de los participantes quedarán bloqueadas en una estructura metálica que se cerrará quince minutos antes de la salida oficial y se abrirá en el momento en que cambien los semáforos de salida de rojo a verde. Recorrido Existen dos recorridos en función de las categorías de los palistas: Uno de los recorridos está comprendido entre los Puente de Arriondas y el Puente de Ribadesella en Asturias, con un total de 20 Kms. Aquí compiten las Categorías Senior, Junior y Veteranos en K2, K1, C2 y C1 El otro recorrido va desde el Puente de Arriondas hasta el Puente del ferrocarril de Llovio en Asturias, con un total de 15 Kms. Aquí compiten las categorías de Cadetes, Centenarios, Mixtas y las embarcaciones del tipo RR. Llegada Al existir dos recorridos en función de las categorías de los palistas hay dos líneas de llegada, una estará situada bajo el Puente de Ribadesella señalado con la correspondiente pancarta de META y la otra llegada para las categorías Cadetes, Centenarios, Mixtas y las embarcaciones del tipo RR estará situada en el Puente de Ferrocarril de Llovio. El tiempo de CIERRE DE CONTROL es de 30 minutos para ambas Metas, a partir de la llegada de la primera embarcación por cada categoría y modalidad. Las embarcaciones de las categorías con meta en Llovio, sólo puntuarán en esta meta.



Himno de las piraguas


Guarde el público silencio(bis)
y escuche nuestra palabra (bis)
De orden de Don Pelayo
después de medir las aguas,
presidiendo el dios Neptuno
los actos de esta olimpiada,
con las <>, los tritones,
el cañón, los centauros y Pialla,
nuevamente se autoriza, en Arriondas,
la carrera de piraguas.
Y cuando demos los vivas
que el reglamento nos manda,
contesten todos a coro,
enronquezcan las gargantas,
que es fiesta de toda Asturias
la fiesta de las piraguas.
Mas si alguno tiene cerca,
una chavalina guapa,
que no la pierda de vista
ni deje de vigilarla;
y, si de veras le gusta,
comience ya a enamorarla,
porque es tradición que en Llovio,
al final de esta jornada,
cuando de las siete en punto
resuenen las campanadas,
a las mozas que lo quieran y se dejen,
Don Pelayo da permiso
para poder abrazarlas.
Y si luego, andando el tiempo,
vamos al cura y nos casa,
con los neños que tengamos
vendremos a las Piraguas
con los collares de flores
y las monteras terciadas,
que no hay fiesta más alegre,
ni más movida y galana,
ni con más bello paisaje,
ni esencia más asturiana.
Cantadlo con toda el alma,
que resuene en todo el valle,
¡Asturias Patria Querida!
el himno de las Piraguas.
Una vez finalizado el himno, se da la salida oficial:
Y ahora sí que va a empezar
la fiesta de las Piraguas...
El juez del Descenso dice entonces <<¡Piragüistas! ¡Preparados! ¡Fuego!>>
Y ya empezó, la carrera por el agua
y quien tenga ojos, que mire
y ponga al mirar el alma
y diga si no es hermosa
la Fiesta de las Piraguas. El juez del Descenso dice entonces <<¡Piragüistas! ¡Preparados! ¡Fuego
Y ya empezó, la carrera por el agua
y quien tenga ojos, que mire
y ponga al mirar el alma
y diga si no es hermosa
la Fiesta de las Piraguas.




VAQUEIROS DE ALZADA







Los vaqueiros de alzada son un grupo humano minoritario, asentado principalmente en el Occidente de Asturias. Su actividad primordial es la cría de ganado bovino y se caracterizan por la itinerancia, pasando los inviernos en las aldeas del valle y los veranos en las brañas o pastos altos.
Los vaqueiros han sido rodeados de multitud de leyendas sobre su origen. Se les ha vinculado con los descendientes de esclavos romanos fugitivos y con los astures cobardes, que no secundaron a don Pelayo en la Reconquista.
A lo largo de la historia, como personajes adánicos, se les han atribuido los pecados originales de la comunidad no vaqueira.
Se les atribuyó ascendencia musulmana, al ver en ellos a los esclavos moros que se sublevaron contra don Aurelio, o a los prisioneros normandos apresados por don Ramiro.
En los años cincuenta Ramón Menéndez Pidal alumbró otra teoría acerca del origen de los vaqueiros.
Basándose en un estudio filológico vinculó a estos con los habitantes de la zona sur de Italia que se establecerían en algunas zonas de Asturias en sucesivas oleadas migratorias.


Costumbres y usos

La identificación entre vaca y vaqueiro es tan grande que seres humanos y animales son calificados con las mismas palabras para definir sus virtudes y defectos.
Las ubres y los pechos son consideradas en ambas especies como símbolo y garantía del bienestar no solo individual sino grupal.
A la hora del matrimonio el vaqueiro busca antes la mujer sana y buena para trabajar que a la hermosa y vaga.
La frecuencia de estos comportamientos, como el resto de los que les diferencian de los aldeanos se van atemperando con la sedentarización pero aún así continúan formando parte de sus señas de identidad. Lo mismo que los juegos infantiles que escenifican los diferentes episodios de la trata y la cría vacuna. El consumo de la carne de las vacas de la casa es considerado tabú para muchos vaqueiros.

Habitat

La palabra braña procede del vocablo romano verania, que se refiere a los lugares de pasto estival. Es el hábitat natural del vaqueiro, el lugar al que se alza con su ganado tras pasar el invierno en las aldeas bajas.




Su doble domicilio les permitía no empadronarse en uno de ellos con lo que se libraban de las levas forzosas del ejército, con el consiguiente fastidio de los aldeanos que si tenían que cumplir con las exigencias del poder.
Jovellanos, con entusiasmo ilustrado, los describe como el pueblo más libre de la tierra. No porque no estén como los demás sujetos a las leyes generales del país, sino porque su pobreza les exime de las civiles, y su inocencia de las criminales.


BODA  VAQUEIRA

La boda Vaqueira es, posiblemente, el enlace nupcial con más autenticidad de los que se celebran en España. Un evento con mucho sabor antropológico que todos los años convoca a centenares de personas el último domingo de julio en el alto de Aristébano, entre los concejos de Valdés y Tineo. En esta braña, familiares, allegados y curiosos en general practican una de las romerías capitales del verano asturiano alrededor de la Capilla de La Divina Pastora.

Declarada de Interés Turístico Nacional, la ceremonia sigue en buena medida el ritual de los antiguos vaqueiros de alzada.











Para algunos se trata de la forma más asturiana de casarse. Una pareja de novios que desee contraer matrimonio por este ancestral rito deberá solicitarlo al Consejo Vaqueiro, quien dará, o no, su visto bueno para que el sueño se haga realidad. Sólo una pareja será la afortunada. A partir de aquí empiezan los preparativos.

Uno de los acontecimientos más importantes de la cultura Vaqueira siempre ha sido el matrimonio. En el Occidente asturiano, los matrimonios mixtos de Vaqueiros y aldeanos eran escasos. Que los Vaqueiros se casaran entre sí era algo muy lógico, por tratarse de una comunidad de signo pastoril y trashumante. El padre del novio acudía a casa de la novia y allí se determinaba, con regateo incluido, lo que cada cónyuge tenía que aportar al matrimonio.
El día de la boda, la comitiva formada por los novios, padrinos e invitados, iba precedida del ajuar llevado en un carro del país tirado por dos vacas. En él se portaba un arca o baúl con ropa blanca, rodeado de sacos de trigo y los enseres que componían el ajuar. Por encima de todo sobresalía la cama matrimonial y en tropel y a galope acudían los caballos con mozas a la grupa y lanzando desde sus monturas gritos de alegría y celebración.

Gran parte de los cánones de esta tradición se siguen recreando hoy en día. La jornada sigue comenzando al mediodía, cuando se reúne la caravana oficial en el alto de la braña y parte junto al cortejo nupcial que va a caballo. Para muchos es el momento más oportuno del año para lucir caballerías y trajes festivos. La cesta de la madrina, adornada con lazos que contienen pan, manteca, huevos y dulces añade más notas pintorescas a la espectacular comitiva. La pareja de novios, hoy como siempre, siguen siendo los protagonistas indiscutibles y se les agasaja con un séquito de gaitas y grupos folklóricos. Frente al altar improvisado al aire libre se intercambian las arras y se da el beso que sella el compromiso. A continuación se sucede un banquete popular, una comida campestre en la que no falta el chosco, el jamón cocido, los frixuelos, sidra, natas montadas de las propias brañas y café vaqueiro.




domingo, 17 de marzo de 2013

ARMANDO PALACIO VALDÉS



Armando Palacios Valdés nació el 4 de octubre de 1853 en Entralgo (Oviedo). Era hijo de un abogado ovetense, Silverio Palacio y Eduarda Valdés, que pertenecía a una adinerada familia de Avilés, y se educó en esta ciudad hasta 1865, en que se trasladó a Oviedo a vivir con su abuelo para estudiar el bachillerato, lo que entonces se hacía en el mismo edificio de la Universidad, en aquel tiempo tuvo la oportunidad de leer la Iliada, de Homero traducida en verso blanco por José Mamerto Gómez Hermosilla, que lo impresionó fuertemente y abrió su interés por la literatura y la mitología. Por entonces formó parte de un grupo de jóvenes intelectuales mayores que él de los cuales se consagraron a la literatura Leopoldo Alas y Tomás Tuero, con los que entabló una especial amistad. En septiembre de 1870 obtuvo el grado de bachiller en Artes y en octubre se trasladó a Madrid para seguir en la Universidad Central la carrera de Leyes, cursando los estudios de Derecho y de Administración, de los que se licenció en 1874. En Madrid mantuvo la relación con Clarín y con Tomás Tuero (los cuales en 1872 vivían en el mismo piso y sacaron tres números de Rabagás, periódico audaz, político satírico). Escribió también como crítico, en colaboración con Leopoldo Alas, La literatura en 1881. Se casó con Luisa Maximina Prendes, que falleció en 1885 tras un año y medio de matrimonio y se casó de nuevo en 1899 en segundas nupcias con Manuela Vega y Gil. Al morir José María de Pereda en 1906, ocupó el sillón vacante en la Real Academia Española. Se dio a conocer como novelista con El señorito Octavio (1881), pero ganó la celebridad con Marta y María (1883), ambientada en la ciudad ficticia de Nieva, que en realidad representa a Avilés. Escribió numerosas novelas, pero también se dedicó al relato breve y a las traducciones. Falleció el 29 de enero de 1938, en Madrid, en plena guerra civil, a los 84 años de edad. 




 BIBLIOGRAFÍA 

Semblanzas literarias (1871).
Los oradores del Ateneo (1878)
El nuevo viaje al Parnaso (1879)
Con Leopoldo Alas, La literatura en 1881
El señorito Octavio (1881)
Marta y María (1883)
El idilio de un enfermo (1883)
José (1885) Riverita (1886)
Maximina (1887) El cuarto poder (1888)
La hermana San Sulpicio (1889)
La espuma (1891)
La fe (1892)
El maestrante (1893)
El origen del pensamiento (1894)
 Los majos de Cádiz (1896)
 La alegría del capitán Ribot (1898)
¡Solo! (1889)
Seducción (1900)
La aldea perdida (1903)
 Tristán o el pesimismo (1906)
Papeles del Doctor Angélico (1911)
La guerra injusta (1917)
Años de juventud del Doctor Angélico (1917)
La novela de un novelista (1921)
El saladero (1923)
La hija de Natalia (1924)
Santa Rogelia (1926)
Los cármenes de Granada (1927)
A cara o cruz (1929)
Testamento literario (1929)
El gobierno de las mujeres (1931)
Sinfonía pastoral (1931)
El gobierno de las mujeres (1931)
Obras completas (1935).
Álbum de un viejo (1940)


La aldea perdida 



RESUMEN DEL ARGUMENTO

En tierras de Laviana la vida transcurre felizmente entre las tareas cotidianas del campo y las romerías, aquí surge el amor entre Nolo y Demetria y también el de Jacinto y Flora. Toda esta paz y tranquilidad se ve enturbiada por la aparición de la minerìa que aunque muchos crean que traerà consigo la civilización y el dinero tambièn les traerà la violencia. Nolo y Demetria disfrutan de sus encuentros en las romerìas aunque estas siempre acaban en peleas constantes entre los mozos de Entralgo y los de Lorìo pero no tendràn mayor transcendencia por ser estas a palos o pedradas, pero con la industrialización llegan unos mineros que cambian estos por las navajas y las pistolas, son violentos y asedian a las mozas del lugar sin ningún miramiento. En medio de todo esto cierto dìa llega la legìtima madre de Demetria a buscarla para llevársela a vivir con ella a Oviedo pero Demetria no se acostumbra a aquella vida y cierto dìa que Nolo la va a visitar por la feria de la Ascensión se escapa con èl para volver a Entralgo. Por otra parte D. Fèlix el capitán, rico terrateniente no ve con buenos ojos que las minas estèn destruyendo las tierras y su idílica forma de vida, verà como parte de sus tierras seràn expropiadas al no quererlas vender. Dos dìas antes de la Fiesta del Carmen se celebran las bodas entre Nolo y Demetria y Jacinto y Flora, por este motivo el dìa de la romerìa el capitán invita a todos a una gran fiesta pero a la llegada a la iglesia estalla una encarnizada lucha entre los mozos del lugar y los mineros que acaba con la muerte de Jacinto y Demetria 



ESPACIO
La obra se desarrolla en el Concejo de Laviana, en los pueblos de Villoria, Entralgo, Lorìo, Canzana y Braña.

TIEMPO
Se desarrolla durante la primera industrialización por tierras de Laviana (la llegada de la minería). El autor nos presenta un paisaje rural idealizado que trata de reflejar la idílica vida de los habitantes de Laviana a finales del siglo XIX. Palacio Valdés enfrenta directamente a la agricultura con la minería advirtiéndonos desde el primer momento de que se trata de dos enemigos irreconciliables.




 TEMAS

Narra los conflictos del cambio de un mundo rural camino de la industrialización mezcladas con la historia de amor entre Nolo y Demetria y las continuas peleas en las romerías de los mozos de Entralgo y Canzana contra los de Lorìo y el Condado.


 ESTILO

Realismo: corriente literaria que se desarrollo en la segunda mitad del siglo XIX y que se caracteriza fundamentalmente por su deseo de representar de forma objetiva la realidad. El lenguaje se adapta a cada personaje y se describe la realidad en que suceden los hechos, el autor narra con exactitud hasta los mìnimos detalles.


jueves, 14 de febrero de 2013

CONCEJO DE LAVIANA









HISTORIA

Prehistoria y Edad Antigua

 Las primeras muestras prehistóricas de este concejo son de la Edad del Bronce como son los túmulos megalíticos de Callacente y La Baúga y las hachas encontradas de Villoria y Tiraña. De su época castreña tenemos ligeras pistas como el castro de El Cercu, El Prau de Castiello y La Corona en Boroñes. Estos castros son atribuidos a la Edad de Hierro, pero no tienen una datación fija por su falta de excavación. De su período romano hay pocas noticias fidedignas pues aunque se sitúan estructuras arquitectónicas como son el puente de Villoria o el torreón de El Condado, además de explotaciones mineras, sus estudios más recientes sitúan sólo en esta zona una ruta romana que cruzaría el valle del Nalón para atravesar el puerto de Tarna. 
Torreón de "El Condado"



Edad Media y Moderna 



 De su época medieval hay pocas noticias, pues algunas se consideran poco fidedignas. Lo que sí esta claro es la existencia de una demarcación con el nombre de Flaviana, cuyos representantes acuden al concilio ovetense del año 1115. En esta época un monasterio que estaba ya acaparando gran importancia era el de San Vicente de Oviedo. En estas fechas esta demarcación ya contaba con un cargo adscrito a su gobierno, teniendo ya gran importancia comarcal y regional debido a la ruta que cruzaba todo el valle del Nalón. Fue en el siglo XIV, cuando la zona del Nalón sufre un cambio en su ordenación territorial y urbanística, así todas estas zonas se ven dotadas de un centro administrativo. La puebla que jerarquizaba el territorio de Laviana es de 1344. Se data la fundación de este villazgo a finales del siglo XIII. Como lugar de tránsito, Pola de Laviana no alcanzó gran desarrollo demográfico, pero su composición social sí marca una diferencia con su entorno agrario, así se supone la presencia en esta puebla de notario, herrero, carpintero, etc. Aparte del dominio patrimonial ejercido por el monasterio de San Vicente, también hay un influjo creciente de las familias señoriales. En el siglo XIV, la situación del concejo de Laviana, continuaba con cotos que escapaban de la jurisdicción, estos eran los cotos de San Vicente y de Villoria, que mantendrían una estructura rural y ganadera teniendo que pagar el diezmo a sus señores y vivir bajo su jurisdicción marcada por el despotismo.
Palacio del Coto - Tiraña

Con la desamortización de Felipe II, es cuando algunos cotos son redimidos por el pueblo, como el coto del Entrialgo incorporándose al concejo de Laviana, no consiguiendo otros cotos salir de las manos de sus señores, como el coto de Tiraña. En el siglo XVIII, quedarán sólo dos enclaves en esta zona, el coto de Tiraña y el coto de Villoria. La guerra de la Independencia no tuvo especial incidencia, únicamente el paso de las tropas francesas por las rutas de Tarna y San Isidro, aquí sí hay algunos sucesos de heroísmo local.


Las guerras carlistas en su tercera guerra destaca su participación ya que fuerzas armadas alcanzarían en sus correrías la mayor parte de Asturias incluyendo el concejo de Lena. 



Siglo XIX en adelante 


En el siglo XIX, hay nuevas transformaciones para Laviana, con el triunfo de las ideas liberales que traerían la disolución de todas las jurisdicciones señoriales y su incorporación a los respectivos concejos, así los cotos de Tiraña y Villoria se incorporan a la jurisdicción del Ayuntamiento de Laviana que adquiere la unidad administrativa que conserva hoy en día. Hay otro cambio sustancial, así el ferrocarril de Langreo se extiende hasta la terminal de Pola, lo que traerá a Laviana el desarrollo minero e industrial. Se funda la empresa Coto Musel que dejará una gran cantidad de cambios en la estructura de Laviana.  Todas estas nuevas actividades produjeron notables cambios en las condiciones de vida y en las ideas ya que hasta mediados de este siglo este concejo era eminentemente agrario. Esto nos lo demuestra la crisis de subsistencia de 1834. En el siglo XX, ya tiene una gran actividad minera. Tuvo una especial incidencia la huelga de 1917 que fue suprimida con una dura represión que no lograría debilitar las ideas del movimiento obrero. En 1934 parte de su población participa en los sucesos revolucionarios de octubre que culminarían con la toma de la capital provincial. En la Guerra Civil, Laviana queda encuadrada en la zona Republicana y será el último reducto del Frente Norte en España. Una vez concluida la guerra, las partidas guerrilleras siguieron combatiendo, destacando la de Lisardo, siendo la zona una de las que tuvo una mayor represión, dejando sus más tristes episodios. Con la política económica franquista la actividad minera tuvo una sensible reanimación y un gran crecimiento demográfico.


Pozu  Carrio

A partir de la década de los setenta hay una profunda crisis del sector minero, lo cual trajo la creación como un intento de reestructuración de HUNOSA que con el tiempo reunió la mayor parte de las explotaciones mineras. La única actividad minera, quedó reducida al pozo Carrio y muchas personas se desplazaron a las minas de la zona baja de la cuenca. 


GEOGRAFÍA

 Está a una distancia de la capital del Principado, Oviedo, de 33 kilómetros. Sus principales vías de comunicación son: AS-17, que atraviesa el concejo de oeste a este, la AS-251 que enlaza con San Martín del Rey Aurelio y la AS-252 que une Pola de Laviana con Aller.
Situado en la cuenca del río Nalón, su superficie se compone principalmente de masa forestal (46,48%), pastos (38,75%) y terreno improductivo (10,36%). El resto se reparte en superficie no agrícola (3,37%), tierras de cultivo (0,58%) y agua (0,46%). El paisaje de Laviana está constituido básicamente de una vega estrecha a la orilla del río Nalón, rodeada de montes. En esta vega encontramos las poblaciones más importantes (Pola de Laviana, Barredos y El Condado) y las principales vías de comunicación (la carretera AS-17 Avilés – Puerto de Tarna y el ferrocarril Pola de Laviana – Gijón). El río Nalón, que cruza el concejo de este a oeste, es alimentado por varios afluentes a su paso por él, entre los que destacan el río la Xerra (o El Condao), el río la Caya (o de la Rebollada) y el río Tiraña convergiendo por su derecha, y el río Soto, El Raigusu (o río Ribota) y el río Villoria convergiendo por su izquierda. La mitad occidental del territorio de Laviana forma parte de la cuenca hullera del Nalón.

El relieve se compone principalmente de los valles y cordilleras formados por la erosión fluvial sobre materiales carboníferos. En la parte oriental encontramos un sustrato calizo que corresponde a las zonas de mayor altitud. Los principales montes de Laviana son Peña Mea (1.560 m), la Triguera (1.291 m), la Xamoca (1.288 m) y el pico Tres Conceyos (1.097 m). El río Nalón cruza el concejo, siendo en La Pola donde logra su mayor amplitud, sus afluentes más importantes son por el margen derecho: el río Xerra, el río la Pontona y el río Tiraña. Por el margen izquierdo el río Soto, El Raigusu, el río Villoría y el Rimontán.

Parroquias. El concejo de Laviana está formado por 8 parroquias, rurales: 

Carrio, 950 habitantes 
El Condado/El Condao, 694 habitantes 
Entralgo, 250 habitantes 
Llorío, 738 habitantes 
La Pola Llaviana/Pola de Laviana, 9.111 habitantes
Tiraña, 1.950 habitantes 
Tolivia, 400 habitantes 
Villoria, 1.361 habitantes


ECONOMÍA

Mucha de su población está jubilada y prejubilada, lo que está trayendo un nuevo cambio con un reaprovechamiento de prados y montes y un resurgir de la ganadería, que además cuenta con buenas subvenciones. El sector primario que en 1984 era el 13,01% pasa en 2000 al 9,3%, el sector secundario pasa del 41,49% al 25% y el terciario del 49,88% al 65,70%. Aquí se ve el cambio producido en este concejo, en un período tan corto como el de 12 años. Este concejo es de tradición agrícola y ganadera, algo que se muestra en sus pastizales. Las explotaciones mineras condicionaron la situación de su poblamiento, concentrado en torno al Nalón, aunque en la actualidad sólo hay un pozo hullero, el Carrio. Muchas personas continúan con esta actividad pero en concejos vecinos. Algo que ha aumentado considerablemente ha sido el sector comercial y el turístico. 

ARTE

 El concejo de Laviana, tiene muchos monumentos y obras arquitectónicas entre las que destacaremos: 

El Torreón, de El Condado, declarado Monumento Histórico Artístico. Aunque se creía romano su estructura es de la baja Edad Media. Su planta es rectangular pero muy deteriorada por los añadidos de hormigón para evitar su desplome. Es de tres pisos con escasas saeteras, el primer piso era utilizado como calabozo, al segundo se accede por un arco de medio punto y al tercero está prácticamente cerrado a la luz. El remate de la torre original era almenado y en la actualidad está limitado por un murete de hormigón. 

La casa natal de Armando Palacio Valdés


En la parroquia de Entrialgo, es una casona rural del siglo XVIII, de planta rectangular y fachada simétrica. Está compuesta de tres cuerpos, dos laterales y el central más adelantado. El eje principal lo forma la puerta adintelada con dos pequeñas ventanas, en el piso superior tiene un balcón y dos ventanas. Los cuerpos laterales con la misma distribución, dos ventanas en el piso bajo y un corredor de madera en el superior.

 La iglesia de San Nicolás, en la parroquia de Villoria, es el único ejemplo de la arquitectura románica, es Monumento Histórico Artístico. Es del siglo XII, de su estructura original sólo queda su portada románica, el resto es una reconstrucción del siglo XVII. Su estructura es de tres naves divididas por arcos sobre columnas con transepto y cabecera cuadrada con sacristía y capilla, la nave central tiene bóveda de arista. Su portada románica está formada por triple arquivolta, las arquivoltas interiores son de arco rebajado, las arquivoltas exteriores tienen similar diseño con motivos de zig-zag, sostenidas por columnas de delgado fuste con capiteles con elementos vegetales. La portada está flanqueada por otras dos de tipo herreriano con pilastras acanaladas que sostienen un frontón triangular rematado en bolas. En su interior se destaca un retablo barroco del siglo XVIII.

 La iglesia de Nuestra Señora de Otero, es de planta de cruz latina. Su fachada es sencilla con un arco de medio punto. El lateral izquierdo de la iglesia presenta una ventana formada por tres arquillas de herradura sobre columnas de fino fuste y capitel vegetal, en el interior destaca un retablo del siglo XVIII.

 La Casona de la familia Menéndez es Monumento Histórico Artístico. Es un conjunto de vivienda y capilla adosada, formando todo ello una estructura rectangular. Está realizado en mampostería y sus vanos alternan balcones con ventanas. La capilla tiene una altura mayor, su acceso es a través de una arcada de medio punto sobre el que se sitúa el escudo familiar. Otros ejemplos a destacar son sus barriadas surgidas por el ensanche de la Pola, destacando la barriada de Fontoria, la de Blanca Nieves, la de Barredos, etc.



FIESTAS

 Entre sus muchas fiestas destacaremos las siguientes: 

En mayo, son las fiestas de Santa Rita en Boroñes, que inauguran la temporada festiva del municipio. En junio, son las fiestas de San Antonio en Villoria. 

En agosto (exactamente el día 15), se celebra la fiesta mayor del concejo, que es la que se organiza en el Santuario de la Virgen de Otero, patrona de Santa María de Laviana. (La leyenda dice que la Virgen María se apareció a un pastor y se decidió construir ahí una iglesia pero los señores de la zona quisieron construirla en otros terrenos y la leyenda dice que los materiales aparecieron trasladados milagrosamente al lugar donde hoy se ubica la iglesia). El fin de semana siguiente, se organiza el Descenso Folclórico del Nalón, que ha sido declarado Fiesta de Interés Turístico y goza de gran popularidad. También tenemos las fiestas de San Justo en Soto (Llorío), entre otras. 

En Septiembre, tenemos el Cristo en El Condao.

 En octubre, se festeja la Pontona, también en el centro de la villa. Es la segunda mayor fiesta del municipio. Coincide con dos certámenes, uno de ganando y otro de queso asturiano. Esta cierra la temporada festiva anual. 


 Hay otos santuarios en el concejo con sus romerías, como son: la de la Visitación en la ermita de Les Campes, La de Cortina, o la de Ribota. 








                                   

lunes, 11 de febrero de 2013

LITERATURA ASTURIANA


Se denomina literatura en asturiano, o también literatura asturiana, al corpus de obras literarias escritas en lengua asturiana. La literatura oral, de transmisión oral, hunde sus raíces en el medievo y se compone fundamentalmente de canciones y romances, presentes aún hoy en la tradición oral de Asturias, y recopilados en cancioneros, como el Cancionero musical de la lírica popular asturiana de Eduardo Martínez Torner.


 Barroco

 El primer texto literario propiamente dicho del que se tiene noticia es el Pleitu ente Uviéu y Mérida poles cenices de Santolaya del clérigo Antón de Marirreguera, que data de 1639 y expone la argumentación del autor en favor de la devolución de las cenizas de Santa Eulalia a la capital asturiana. Antón de Marirreguera, es así mismo, autor de muchos otros textos, como las fábulas Dido y Eneas y Píramo y Tisbe o las obras teatrales de L'ensalmador o L'Alcalde. Destaca, en su obra una pieza de teatro que lleva por título Diálogu Políticu que iniciaría un género propio de la literatura asturiana y de nombre homónimo, que viene a poner en la boca de los personajes las ideas y las críticas políticas, también de inspiración grecorromana, semejante al tratamiento dialogado que Platón le dio a su filosofía. Este camino lo seguirían después otros autores que verían en el uso de los personajes populares una manera de acercar sus ideas al pueblo llano. El otro autor del Barroco Asturiano, es Bernaldo de Quirós, militar de carrera nombrado por la Junta General del Principado para ayudar al Rey Felipe V. De él tan sólo se le conoce un poema de extraordinaria longitud Pictures del Caballu. Destaca en esta primera etapa el origen social de clases superiores de ambos autores, en oposición a lo que sucedería más tarde, son las élites del país las que se expresasen en la lengua asturiana, tales como curas, nobles y militares de estamento privilegiado. En esta época, ni en León ni en Miranda do Douro aparece ningún escritor y la situación del idioma sigue allí arrinconada en el terreno de la oralidad. Es de destacar la coincidencia en no más de 20 años desde el surgimiento del primer autor en asturiano y la inauguración de la Universidad de Oviedo, con el ambiente intelectual que promueve. No es raro, pues, que el primer poema del asturiano sea editado o conocido por ser el ganador de un concurso de poesía hecho en Oviedo.



 La Ilustración Asturiana o la Xeneración del Mediu Sieglu

Tras el Barroco, se abre un gran período para la literatura asturiana, que es el coincidente con la Ilustración Asturiana, un período de gran desarrollo intelectual y literario con respecto a siglos pasados. Gaspar Melchor de Jovellanos, fue el principal mentor de la literatura asturiana de la época y un firme defensor de la creación de la Academia Asturiana de las Buenas Letras, que más tarde se crearía en 1919 para ulteriormente restablecerse en 1981 con el nombre de Academia de la Llingua Asturiana. Entre las aportaciones de Jovellanos a la literatura, destacan las "instrucciones" para la creación de una normativa común y la recopilación de un diccionario, una gramática y una ortografía del asturiano. Un poema anónimo, llamado Señor Conde campumanes y fechado en 1781, se le suele atribuir. El grupo que lo rodea, va a empezar la tarea de defender la lengua asturiana y darle el valor necesario. Surge entonces una preocupación por la situación del idioma y una necesidad de dotarlo de instrumentos que posibiliten su futuro y que vayan a servir para la normalización. Es por eso que el mismo Jovellanos propone la creación de una Academia con el objetivo de normativizar y recoger la riqueza del idioma. Es la lengua viva de nuestro pueblo, la mamamos todos, como quien dice, con la primera leche; va pasando tradicionalmente de padres a hijos y se continúa de generación en generación [...] Con un cartón y un lápiz a mano, en casa, en la calle, en el paseo, en el campo, podemos enriquecer todos los días ese precioso tesoro. Bruno Fernández Cepeda es otro de los escritores de la Generación del Medio Siglo, se sabe que era profesor de latín y clérigo y sólo se conservan de él tres poemas: La enfermedá, Felicitación d'unos díes y Bayura d'Asturies. Xosefa Jovellanos, hermana de Gaspar de Jovellanos, es el primer nombre de mujer que suena en la literatura asturiana y en los temas de sus poemas se encuentran elementos que definen la corriente ilustrada: La crítica ante las desigualdades sociales o la denuncia del comportamiento de la nobleza. Se conservan de ella los siguientes poemas: Carta, Preparativos pa la proclamación de Carlos IV n'Uviéu, La proclamación de Cuarlos IV, Fiestes a Xovellanos y Les esequies de Carlos III. Se conservan solamente tres obras del Anón Balvidares Argüelles : Diálogu Políticu, L'entierru del callóndrigu Reguero y El misteriu de la Trinidá y vida de Xesucristu en las que están presentes algunas ideas ilustradas mezcladas con un fuerte componente de devoción cristiana. En lo referente al origen social de los escritores, siguen siendo parte de los sectores más cultivados y económica y políticamente más poderosos de la sociedad asturiana. La ilustración, en Asturias, tiene un giro asturianizante y se acerca al uso de la lengua haciendo de ella una herramienta más de su línea de pensamiento. Las obras están más alejadas del pueblo, tienen menos vocación popular y más erudita y se desconoce por completo si gozaban del aprecio popular.



Gaspar Melchor de Jovellanos

 El Siglo XIX

 En 1839 se publica en Oviedo la Colección de poesías en dialecto asturiano una antología preparada por Xosé Caveda y Nava, que recoge la obra más importante de los escritores asturianos de siglos anteriores y varios poemas propios. La aparición de este libro hace que muchos jóvenes se animen a escribir una obra que quiere reflejar las costumbres del pueblo en su propia lengua. También destaca de esta época la figura de Xuan Xunquera, que redacta la Gramática asturiana codificando las reglas gramaticales de la lengua. Poetas como Domingo Hevia, Benito Canella, Xosé Caveda, Teodoro Cuesta, Xuan María Acebal, Xosé María Flórez y González, Xosé Napoleón Acebal y Nolón son nombres de poetas y dramaturgos de la época, destacando Enriqueta González Rubín como narradora. Xosé Caveda y Nava es sin duda el referente literario para las generaciones futuras, tanto por los poemas que escribe como por su afán recopilador. Sus poemas son de diversos temas; histórico: La Batalla de Cuadonga; de tradición popular: Los enamoraos de 'aldea, La Paliza, La vida de l'Aldea; de carácter sentimental: El Neñu enfermu; de carácter escatológico: La defensa del peu. Juan María Acebal fue un escritor destacadísimo, que mereció el título de «Príncipe de los Poetes» entre sus contemporáneos. Su obra no es muy extensa pero representa la cumbre poética del siglo XIX asturiano, pudiendo clasificarla temáticamente; poesía religiosa: A María Inmaculada, Al niñín Jesús, Venite ad me, A maría y Refugium peccatorum; de carácter paisajístico: Cantar y más cantar, La fonte de Fascura, La vida del aldeanu; otros: L'ahmor del hogar, A so maxestá la reina Sabel Segunda y Arreglu de cuentes. También tradujo al asturiano tres odas de Horacio, Beatus ille, Maeccenas atavis y Cum tu, Lydia, Telephi. Teodoro Cuesta representa la corriente popular y es el poeta más conocido e influyente. Escribe sus primeros poemas bajo el magisterio de Caveda, de quien toma el título genérico para ellos de La vida de l'aldea. En su extensa obra podemos encontrar poesía satírica, costumbrista, religiosa y de circunstancias.



El Regionalismo Asturiano

Coincidiendo con los primeros movimientos regionalistas de la política asturiana, se dan a conocer un grupo de escritores que se sienten herederos directos de la labor poética de Cuesta y Acebal. Son los poetas Pepín de Pría (Nel y Flor y La fonte del cai), Constantino Cabal (L'alborá de los malvises), Marta Balbín, Constantino Cabal o Daniel Albuerne, y los dramaturgos Pachín de Melás, Eloy Fernández Caravera o Fabricio.
Pachín de Melás

 Este grupo crea en 1919 una Real Academia Asturiana de Artes y Letras, que no va a tener ninguna operatividad. Destacan también Enrique García-Rendueles por la elaboración de un diccionario, una nueva gramática y la recopilación de una antología, Los Nuevos Bablistas (1925). Pero sin duda es Fernán Coronas el más destacado escritor de la época. Fraile oblato que viaja por toda Europa aprendiendo lenguas antiguas y modernas al tiempo que adquiere una considerable cultura. Las dos últimas décadas de su vida las dedica al estudio del asturiano, recogiendo datos para un diccionario general, elaborando otro de la rima, una gramática... y componiendo muchos poemas que hoy siguen en su mayor parte inéditos. Con él empieza el siglo XX para la literatura asturiana.

 El siglo XX

 La literatura asturiana, tras el auge del regionalismo, sigue anquilosada en los mismos temas costumbristas y pierde el favor del público, cerrándose en ella misma. Los autores de esta época, Xiquín de Villaviciosa, Matías Conde o Laudelino León, no alcanzan la categoría de sus predecesores ni su buena acogida. La Guerra Civil supone una ruptura política, social, económica y cultural. La literatura asturiana sigue siendo humorística y ruralizante, y está desconectada de una realidad social cada vez más industrial y urbana. Sin embargo, algunos autores desde los años 60 intentan superar el costumbrismo tradicional, destacando María Josefa Canellada, poeta y narradora de corta pero intensa obra, publica en 1980 Montesín el primer libro juvenil y en 1990 la novela corta Malia, Mariantia y yo. También destacó Nené Losada Rico, cuya obra bebe en la tradición oral, que compone Cantares Valdesanos y publica también los poemarios Entre apigarzos, El nome de las cousas y la antología Fueyas que reverdecen. Véase también: Xeneración de la posguerra.



 El Surdimientu


La aparición de Conceyu Bable en la Asturias de 1974, el movimiento prolengua, que al término de la dictadura y durante toda la transición se vive en Asturias y de manera muy especial en el ámbito universitario, así como el surgimiento en los años setenta del Nuevu canciu astur, propicia una etapa de apogeo y de rupturismo total, que iguala en número de autores que están escribiendo con todos los que habían escrito anteriormente. Renovando temas por completo, tocando la política, el amor, el erotismo en la poesía y adquiriendo gran relevancia la novela y los cuentos así como ampliándose de manera notable el volumen de las traducciones de otras lenguas. De esta época, llamada surdimientu, y que muchos críticos insisten en dividir en «primer surdimientu» y «segundu surdimientu», destacan: Manuel Asur destaca por ser el inaugurador de la corriente y la etapa, con el libro de 1977, Cancios y poemes pa un riscar. Si bien publicaría más tarde otros como Poesía (1976-1996) y Orbayos. Xuan Xosé Sánchez Vicente hombre polifacético, político, ensayista. Se le conoce también por su producción poética como As de Corazón/es/y/es y la novela La muerte amiya de nueche. Berta Piñán la poeta asturiana de mayor relevancia, con poemarios como Vida Privada o el libro de relatos La tierra entero. Xuan Bello en la actualidad el escritor de mayor proyección fuera de Asturias; poeta, novelista y articulista. Es autor de la novela Hestoria universal de Paniceiros y del poemario El llibru vieyu. Ismael González Arias uno de los autores más leídos; novelista, polémico articulista y compositor. Es autor de las novelas En busca de Xovellanos y El tiempu de Manolo. También es autor del Diccionariu de la llingua y otros órganos sexuales. Antón García otro de los autores más conocidos, tanto en poesía como en prosa, con poemarios como Venti poemes y novelas como Díes de muncho. Vanessa Gutiérrez destaca por ser una de las poetas más destacadas en el presente, con libros como La danza de la yedra. Xandru Fernández autor prolífico con incursiones en distintos campos de la novela, siendo autor de Les ruines y La banda sonora del paraísu.